Según Google, el 97% de los consumidores buscan negocios locales en Internet. Esto significa que si no tienes un sitio web, estás perdiendo clientes potenciales. También estás perdiendo oportunidades de mejorar y proteger la reputación de tu empresa. Debes tener en cuenta que no seguir las normas puede ser perjudicial, especialmente si no se hacen las cosas bien desde el punto de vista legal. Siguiendo las mejores prácticas que se indican a continuación, podrás crear un sitio web eficaz y legal.
Consejos para una página web legal y profesional
Con estos sencillos consejos, te aseguraras de que tu web cumple con todos los requerimientos legales, así podrás dormir tranquilo y concentrarte solo en lo que importa, llegar a tu público objetivo.
Protege tu dominio
Lo primero que necesitas para crear un sitio web para tu negocio es un nombre de dominio. Un nombre de dominio es la URL (.com, .net, etc.) que la gente utilizará para acceder a tu sitio web. Un nombre de dominio debe ser corto y fácil de recordar. Además, en el caso de las empresas, si se dispone de un nombre comercial, ese nombre, es la mejor opción. Los nombres de dominio son únicos por su propia naturaleza. Tendrás que encontrar uno que no esté ya registrado.
Una vez encontrado, hay que registrar el dominio: muchos servicios, como Google y Go Daddy, se encargan de registrarlo. Muchas empresas optan por registrar un dominio comúnmente mal escrito para facilitar a los clientes la búsqueda de su negocio. Sin embargo, recuerda que la ciberocupación (registrar un nombre de dominio de mala fe para aprovecharse de la marca o el fondo de comercio de otra persona) es ilegal.
Además, es una buena idea registrar el nombre de tu empresa en las redes sociales más populares, como Twitter, Facebook e Instagram. Aunque actualmente no tengas previsto utilizar estos servicios para promocionar tu negocio, con el tiempo pueden convertirse en herramientas útiles para la comercialización de tu empresa. Registrar el nombre de tu empresa ahora te ayudará a asegurarte unos excelentes derechos de uso en una fase temprana.
Por último, aunque no es imprescindible, no es mala idea solicitar la protección de la marcauna vez registrado el dominio. Esto reforzará tu posición en caso de futuras disputas y evitará que otros registren el mismo nombre ante las autoridades legales competentes.
Contrata a un desarrollador/diseñador web
Si quieres un sitio web de aspecto profesional, tendrás que contratar a un diseñador o desarrollador. La mayoría de los desarrolladores y diseñadores experimentados pedirán a sus clientes que firmen un contrato de desarrollo o diseño de sitios web como condición previa para realizar el trabajo. Sin embargo, tanto si su diseñador o desarrollador le pide que firme un contrato como si no, necesitas uno para proteger tu negocio. Con un contrato, puedes definir el plazo del proyecto, tus expectativas para el trabajo y el coste del mismo. Sin un contrato, un proyecto puede durar más de lo previsto, o la factura final puede superar las expectativas de las partes, lo que puede dañar la relación.
Crea una política de privacidad
Si recoges información personal de tus clientes (nombre, dirección de correo electrónico, etc.), deberías considerar la posibilidad de crear una política de privacidad. Como mínimo, tu política de privacidad debe indicar qué información recoges, con quién la compartes y cómo la utilizas.
Una política de privacidad clara reforzará la credibilidad de tu empresa y te ayudará en el improbable caso de una demanda. Legalmente, ayudará a tu empresa a demostrar que has comunicado claramente la política a tus clientes y que la has seguido al pie de la letra.
Escribe las condiciones de uso
Dependiendo de la naturaleza de tu sitio, puede ser una buena idea establecer las condiciones bajo las cuales la gente puede utilizarlo. Las condiciones específicas dependerán de la naturaleza de tu sitio. Por ejemplo, si vendes productos, puedes establecer en tu sitio web las condiciones de venta, como las devoluciones y la forma de tratar los productos perdidos o dañados después de su envío. Del mismo modo, si permites que otros publiquen en tu sitio o en un foro de tu sitio, puedes incluir una exención de responsabilidad o una declaración que limite tu responsabilidad por la información publicada por otros. Los términos y condiciones deberán adaptarse a la naturaleza de tu negocio y de tu sitio web. Puedes consultar a un abogado para determinar qué debes cubrirte.
Cuidado con el uso de la propiedad intelectual
Si utilizas imágenes, logotipos, vídeos o diseños en tu sitio web y no eres el propietario, debes tener cuidado. En resumen, la protección de los derechos de autor se aplica desde el momento en que se realiza la creación, tanto si se exhibe como si no. También debes saber que la violación de los derechos de autor está muy extendida en Internet, pero eso no significa que sea legal o segura. Si quieres utilizar una obra creativa que incluya una fotografía u otra imagen que no sea de tu propiedad, siempre debes pedir permiso primero. Puedes obtener un permiso por escrito mediante un “acuerdo de licencia de derechos de autor” o un “acuerdo de licencia de marca”. Si no lo haces, puede ser responsable de infringir los derechos de autor o de marca.
Esto también se aplica si permites que otros publiquen en tu sitio web. Por ejemplo, cuando se lanzó el popular sitio web de publicación de imágenes Pinterest, causó una tormenta porque muchas personas consideraron que las condiciones de servicio de la empresa fomentaban activamente la infracción generalizada de la propiedad intelectual. Finalmente, para evitar posibles responsabilidades, la empresa respondió a estas preocupaciones cambiando sus condiciones de servicio, pero muchos titulares de derechos de autor se quedaron con las ganas.
Supervisa cuidadosamente a tus usuarios y empleados
Si tus usuarios o empleados crean contenidos para tu sitio, debes supervisar cuidadosamente sus actividades. Como se ha mencionado anteriormente, te recomendamos que incluyas un descargo de responsabilidad en tus términos y condiciones para distanciarse del material y los comentarios proporcionados por los usuarios. Además, si tienes conocimiento de que los usuarios están publicando material en tu sitio que infringe los derechos de autor o es difamatorio, la mejor práctica es eliminar el material.
Aunque los usuarios pueden ser un problema para el sitio web de una empresa, los empleados también deben ser vigilados de cerca. Esto se debe a que actúan en nombre de la empresa y es probable que tengan que rendir cuentas de sus acciones. Para minimizar la probabilidad de que le pidan cuentas, debes tener un código de conducta claro para tus empleados que defina lo que es y lo que no es aceptable en tu sitio web. También debes contar con un sistema para supervisar el comportamiento de los empleados y asegurarte de que cumplen la política.
Es cierto que la gestión de un sitio web comercial conlleva riesgos particulares. Aun así no hay duda de que los beneficios superan a los riesgos. Y siguiendo estas buenas prácticas, puedes minimizar los riesgos para ti y tu empresa.